Fecha última actualización 26/02/2023 por El Viajero Accidental
Hola lectores, ¿cómo están tanto tiempo? Les voy a contar mis experiencias por una de las regiones más bonitas del sur de Italia: Campania.
Para ello les voy a hacer primero una breve reseña geográfica. Campania es una de las veinte regiones que conforman la República Italiana y su ciudad capital es Nápoles. Está ubicada en Italia meridional, limitando al oeste con Lacio, norte con Molise, al este con Puglia y Basilicata, al sur con el mar Tirreno (mar Mediterráneo). Es la tercera región más poblada del país con casi 6 millones de habitantes y la de mayor densidad con 400 habitantes/km². La región de Campania está formada por 5 provincias: Avellino, Benevento, Caserta, Salerno y Nápoles. Administrativamente también pertenecen a esta región las pequeñas islas Flégreas (Isquia, Prócida, Vivara y Nisida) y la principal y bellísima isla de Capri, todas ubicadas en el golfo de Nápoles.
La región de Campania (superficie: 14 mil km2) posee un interior montañoso compuesto por montañas separadas que no superan los 2000 metros sobre el nivel del mar y una costa que se extiende a lo largo de 350 km sobre el mar Tirreno con macizos volcánicos como el monte Vesubio (1277 m) y los Campos Flégreos. Otras dos zonas volcánicas son Roccamonfina y el monte más alto de la isla de Isquia, el Epomeo. Su costa posee cinco golfos: Gaeta, Pozzuoli, Nápoles, Salerno y Policastro. La “costiera Amalfitana” es una porción de costa enclavado en la península de Sorrento hacia el golfo de Salerno que cuenta con ciudades de gran interés turístico y cultural, declaradas Patrimonio de la Humanidad por la Unesco en 1997; entre ellas Amalfi, que la veis en foto de cabecera, Positano y Ravello.
En realidad, para darnos una idea de la importancia cultural de esta zona, Campania posee cinco conjuntos culturales considerados Patrimonio de la Humanidad por la Unesco: el centro histórico de Nápoles (1995); la Costa Amalfitana (1997); el Palacio Real de Caserta (con el parque, el acueducto Carolino y el complejo de San Leucio) (1997); las zonas arqueológicas de Pompeya, Herculano y Oplontis (1997); el Parque nacional del Cilento y Valle de Diano (con los sitios arqueológicos de Paestum y Velia y la cartuja de Padula) (1998).
No les voy a hablar de los pueblos o ciudades mayormente conocidas desde el punto de vista turístico, les voy a mostrar otros lugares más inexplorados de esta región.
Avellino: naturaleza viva
Todo empezó en Avellino, una pequeña y bella ciudad de la Campania a la que aterricé por cuestiones laborales. Avellino es la ciudad capital de la provincia de Avellino, un valle rodeado de naturaleza en el valle de Irpinia. Tierra llena de paisajes de increíble belleza que han hecho que a esta provincia se la apode “Verde Irpinia”: montañas, grandes llanuras, magníficas reservas naturales, lagos y ríos.
La región de Irpinia se deja descubrir poco a poco, con un recorrido que penetra en la naturaleza. Encontramos pueblos antiguos inmersos en el verde de los valles que se abren a los pies de las cadenas montañosas. Por los amplios valles se extienden viñedos y olivares cuyos frutos permiten una excelente producción de vino y aceite. La cuidad de Avellino cuenta con una preciosa y amplia calle peatonal, corso Vittorio Emanuelle II, que da vida a la ciudad; en ella se encuentra la iglesia del Santo Rosario y al final de la misma, la Catedral de Avellino. Cerca de la catedral está la Torre del Orologio, una imponente obra arquitectónica de estilo barroco. Fue construida en 1650 sobre la base de una torre de la antigua muralla o sobre los restos de un antiguo campanario y que probablemente haya sido una torre de avistamiento de la vieja muralla de la ciudad. Tiene 36 metros de altura sobre una base cuadrangular que soporta una estructura de estilo arquitectónico toscano-dórico de piedra dura oscura con un segundo orden realizado en tufo y ladrillo de estilo corintio.
Un sitio interesante a visitar muy cercano a Avellino en la región de Irpina en el interior del Parque regional del Partenio es el Santuario de Montevergine situado a 1500 metros sobre el nivel del mar y rodeado de bosques de castaños. Se accede mediante un funicular al cual se sube en la ciudad de Mercogliano. Este santuario es un complejo monástico mariano declarado monumento nacional. La abadía de Montevergine es una de las seis abadías territoriales de Italia. Tiene una basílica catedral que en el interior tiene el cuadro de la “Madonna di Montevergine” que es venerada por cerca de un millón y medio de pelegrinos al año. El culto a esta virgen proviene de la voluntad de un monaco eremita, Guglielmo da Vercelli, de dedicar su propia vida al culto de María, formando en poco tiempo un orden monástico. El cuadro representa a la virgen María en su trono con el niño Jesús sentado sobre su pierna izquierda y que mira a la Madre sosteniendo con la manito derecha un pliego de su manto (Siglos XIII-XIV d.C.). Dulce y severa al mismo tiempo, la Virgen tiene el rostro ligeramente orientado hacia el Hijo, mientras que sus ojos se vuelven hacia quien la observa, y es esta mirada la que atrae con su encanto arcano. También se la conoce como “Madonna Nera” (virgen negra) o todavía mayormente como “Mamma Schiavona”; en dialecto napolitano “schiavo” significa oscuro de piel lo que da idea de la importancia que los fieles daban al color del rostro de la Virgen. De hecho, la imagen representa una Virgen negra sobre la cual sobresale la escritura “Nigra et formosa es, amica mea”, parafraseando una famosa expresión latina del “Cantico dei Cantici”. Otra de las hipótesis fue que el nombre Mama Schiavona o Madonna nera significaba “’Madonna del popolo” (Virgen del pueblo) de los trabajadores de la tierra, los esclavos, como decimos en mi país, los laburantes. En cambio, se llama así porque Schiavona es el lugar de origen de los Aragoneses que han hecho llevar el cuadro de la Madonna hasta este lugar; ya que los aragoneses en el siglo XV dominaron la región de Nápoles. El culto a la Virgen negra emerge en los siglos XII-XIII y representa la imagen concreta del principio femenino universal. ¿Por qué el color negro? Porque en la historia de las religiones mundiales, la sustancia negra (identificable a un misterioso “objeto” de piedra o con características vegetales) representa el principio de la primera Materia que se encuentra en las vísceras de la Tierra. Y la Virgen (Materia prima/Madre por excelencia) encarna, al nivel de culto más alto, el arquetipo de la fundación de la Existencia.
El muy renombrado escritor, poeta y director de cine italiano Pier Paolo Pasolini visitó este santuario en los años 60; también vienen a rendir homenaje el 2 de febrero día de la Calendaria a la “Madonna di Montevergine” numerosos homosexuales y trans que procuran defender su derecho a la devoción, acompañando su ingreso a la iglesia con música y canciones. Sostienen «Davanti a Mamma Schiavona siamo tutti uguali» (delante a la Mamma Schiavona somos todos iguales). El motivo es debido a una tradición oral que ha permanecido intacta a través de los siglos, según la cual en 1256 la Madonna di Montevergine habría milagrosamente liberado dos amantes homosexuales que estaban detrás de capas de hielo, atados a un árbol.
Paestum: la Magna Grecia
Y un día, dejando atrás Avellino y alrededores, salimos de excursión hacia el Sur de Campania, visitando diferentes sitios. En el camino a Paestum pasamos por Battipaglia donde se encuentran muchas de las factorías de leche de búfala denominadas “caseificio” en las que se elaboran principalmente la mozzarella di búfala y otros derivados como cremas y helados…son deliciosos!! ¿Y sabés por qué? Porque la leche de búfala tiene mayor contenido de grasa que la leche de vaca, sin embargo es más saludable por su mayor contenido de ácidos grasos poliinsaturados, vitaminas, minerales y proteínas y a su vez por poseer menor cantidad de colesterol. Me tomé un “macchiato” con un canoli relleno con crema de leche de búfala…¡riquísimo! Y seguimos viaje hacia Paestum.
Paestum se encuentra en la localidad de Carpaccio en la provincia de Salerno. Es un sitio arqueológico de gran importancia, reconocido por la Unesco como “Patrimonio de la Humanidad”, junto con el Parque Nacional del Cilento y el Vallo di Diano. Los sitios arqueológicos más conocidos y visitados de la Magna Grecia son Pompeya y Hercolano que están cerca de Nápoles, sin embargo Paestum es menos conocido pero es impresionantemente bello y está muy bien conservado. Paestum fue fundada por los griegos alrededor del siglo VII. a.C., cercana al mar y fuertemente amurallada, a la que le dieron nombre de Poseidonia en honor al dios del mar. La ciudad fue ocupada sucesivamente por los Lucanos (400 a.C.) hasta que en 273 a.C. Roma la hizo una colonia próspera, dándole su nombre actual. Su declinación irreversible comenzó en la Edad Media. Los bienes de Paestum se encuentran en un excelente estado de conservación debido a los muros construidos por los griegos y reforzados luego por los Lucanos y Romanos.
Lo que es más sorprendente es la visión de tres majestuosos templos colocados en una llanura verde, grandes edificios de estilo dórico.
El Templo de Hera, que se remonta al siglo VI aC, es el más antiguo
El Templo de Neptuno (siglo V a C.) se parece a una enorme construcción hecha de travertino con un cálido color dorado que varía en los diferentes momentos del día. Es una joya de la arquitectura dórica: majestuoso y al mismo tiempo elegante.
El Templo de Ceres (siglo VI a. C.) dedicado a la diosa Athena, en la época medieval se transformó en una iglesia y contiene adosadas a la pared exterior tres tumbas cristianas.
Además de los templos se encuentran el pequeño Ekklesiasterion que cumplió funciones legislativas y de elección de juez durante el período griego y que logró conservarse durante la época romana por no haber sido descubierto y el pequeño anfiteatro que es de origen romano (siglo I a.C.). En verano, una caminata nocturna en este magnífico escenario con conciertos de música y espectáculo de luz, ofrece la oportunidad a los visitantes de sumergirse en un ambiente único, entre las obras de las grandes civilizaciones del pasado. Estos templos han sido fuente de inspiración por el 1700 de muchos importantes escritores, poetas y artistas como Goethe, Shelley, Canova y Piranesi.
Dentro del sitio arqueológico se encuentra la iglesia de la Santísima Annunziata de principios del siglo V d.C. y el Museo Nacional de Paestum, un sitio importante que no se puede dejar de visitar ya que posee una de las más importantes colecciones arqueológicas de Italia. Contiene numerosos hallazgos provenientes de la ciudad, vasijas de cerámica de Poseidonia (VI a V a.C.), vasijas pintadas con figuras decorativas en color rojo, tumbas lucanas pintadas, entre ellas la más famosa, la “tomba del tuffatore” (tumba del buzo, zambullidor o clavadista) que representa la liberación del alma (480/70 a.C.). Esta tumba es el único testimonio de pintura griega de gran dimensión antes del siglo IV a.C. Es singular por el sujeto representado: un joven desnudo que se sumerge en el océano, imagen metafórica del pasaje de la vida a la muerte. Mientras que los griegos tenían una visión muy negativa del más allá, en el siglo V a.C se difunden nuevas ideas basadas en la esperanza de una forma de vida después de la muerte. Sobre esto Platón definirá a la muerte como la “liberación del alma”, anticipando así creencias religiosas más recientes.
Castellabate: Benvenuti al Sud
Siguiendo nuestro camino hacia el sur llegamos a Castellabate. El pueblo donde se filmó la famosa película “Benvenuti al Sud” (2010) dirigida por Luca Miniero y protagonizada por Alessandro Siani y Claudio Bisio. Una película muy tierna y que representa con humor e ironía la diferencia de idiosincrasia entre la gente del norte y del sur de Italia. Castellabate es un municipio italiano de 8000 habitantes de la provincia de Salerno que forma parte del Parque Nacional del Cilento y Valle de Diano, de la Comunità Montana Alento-Montestella. Desde 1998 es Patrimonio de la Humanidad de la Unesco. El territorio (37 km2) incluye el centro histórico de Castellabate a 230 metros sobre el nivel del mar, capital del municipio y uno de los “Pueblos más bellos de Italia”; y forman también parte de Castellabate, Santa María, San Marco, Ogliastro, Lago y Alano.
Llegamos primero a Santa María donde realizamos una caminata por el paseo marítimo. Dentro del Parque Nacional del Cilento, Alburni y Valle de Diano, Castellabate ha merecido la calificación de “Bandiera Blu” (Bandera Azul) desde 1999 gracias a una buena gestión de las aguas balnearias y a la valorización de los recursos ambientales. Santa María posee un restaurante “Le gatte”, famoso porque en él que transcurrió una de las escenas más tiernas del film, aquella en la que el protagonista cena con sus empleados y ellos le hacen experimentar las bondades de vivir en el Sur.
El casco histórico de Castellabate se encuentra subiendo y desde el mismo se puede apreciar una hermosa vista de Santa María. Castellabate está lleno de bienes artísticos y naturales en un pueblo que conserva aún la estructura urbana medieval. Callejuelas, rincones, arcos, escalinatas, palacios, y casas unidas entre sí en las que domina la piedra gris, se suceden sin una continuidad precisa, a veces dando la espalda a la intensa luz, a veces abriéndose hacia los espacios verdes de las pendientes que descienden hacia un mar cristalino espléndido en uno de los rincones más evocadores de la costa del Cilento.
Y en la caminata llegamos a la plaza donde se filmó “Benvenuti al Sud”, la plaza donde estaba la “Poste Italiane” (oficina de correos) que en realidad es un café y en la que por supuesto me tomé una foto. Bajando las escaleras llegamos a la piazzetta del borgo que en su muro tiene inscrita una frase de Gioacchino Murat, general francés, rey de Nápoles entre 1808 y 1815 y mariscal del Imperio de Napoleón Bonaparte. Murat en 1811 visita Castellabate y del “Belvedere di San Costabile” (mirador) pronuncia la frase que quedará para siempre en la historia de la ciudad: “Qui non si muore!” (aquí no se muere) haciendo referencia a la belleza del lugar…y así me despidió Castellabate antes de seguir camino a Acciaroli.
Acciaroli: playa del Cilento
Siguiendo nuestro camino costero, pasamos por un pueblo encantador: Acciaroli. Esta ciudad de mar fue elegida entre otras por Ernest Hemingway para pasar unos días en 1951. Se dice que muchas vivencias e historias que recogió en Acciaroli están reflejadas en su libro “El viejo y el mar”. Es un pequeño pueblo marinero que posee una iglesia del siglo XII dedicada a la “Santissima Annunziata” que se ha conservado a través del tiempo, y una torre de avistamiento normanda; también un pequeño puerto turístico y una playa de belleza única también de bandera azul.
Un artículo del periódico “La Vanguardia” de España del 7 de setiembre de 2016 (“El secreto de la longevidad se encuentra en Acciaroli”) explica un estudio científico realizado sobre 81 personas centenarias censadas a comienzos de septiembre de 2016 sobre un total de 700 habitantes en el pueblo de Acciaroli. Dicho estudio fue llevado a cabo por Investigadores de la Universidad de San Diego, California (EE.UU.) liderados por el Dr. Alan Maisel y asistidos por colegas de la Universidad La Sapienza de Roma (Italia). La propensión de estos centenarios a casi nunca padecer enfermedades cardíacas o cognitivas como el alzheimer se explicaría por el hecho de que un marcador biológico, extrañamente, está poco presente en sus organismos. Se trata de un vasodilatador llamado adrenomedulina. Este marcador sanguíneo está presente de manera mucho más reducida en los sujetos estudiados y parece actuar como un poderoso factor de protección, favoreciendo un desarrollo óptimo de la microcirculación. Su presencia tendría consecuencias negativas ya que potenciaría la habilidad de las células cancerígenas para extender su suministro de sangre y permitir así una mayor proliferación celular. Además se reveló en el organismo de estas personas ciertos metabolitos (pequeñas moléculas) que podrían influir positivamente en la longevidad y el bienestar de los centenarios de Cilento. Se les realizó avanzados análisis sanguíneos (ADN, metabolismo, entre otros), y otros como controles cardíacos y neurológicos. Los investigadores se interesaron en la genética pero también en la alimentación de estos pobladores, la famosa dieta mediterránea a base de aceite de oliva, que por otra parte ellos mismos producen. Los centenarios podrían tener un gen que logra extraer las propiedades beneficiosas de ciertas plantas aromáticas consumidas regularmente como el romero, que mejora las capacidades del cerebro. Entre las 80 personas ancianas que participaron en el estudio, 25 de las cuales eran centenarias, ninguna sufría la enfermedad de Alzheimer. Eso sí, todas practicaban una actividad física a diario, como la pesca, el mantenimiento de su huerto o el paseo en este pueblo de calles escarpadas…y muchas de estas personas parece que mantienen actividad sexual.
Realmente, esta región y la calidez de esta gente dan las condiciones para sentirse como Claudio Bisio en “Benvenuti al Sud”. Si todavía no la vieron….se la recomiendo!! Si querés vivir mejor y más años…venite al Sur!
Delicias de la Campania
Este artículo no estaría completo si no nombráramos las delicias de la Campania. Campania es una zona muy fértil, en los siglos III y I a.C. fue reconocida por su producción de vino que se exportaba en ánforas y por la artesanía de cerámica Campaniense caracterizada por poseer un pigmento negro brillante similar al barniz, también muy exportada a todo el Mediterráneo Occidental. Entre los vinos de Campania destacan: Lacryma Christi, Fiano di Avellino, Greco di Tufo, Ischitano, entre otros. El Fiano di Avellino es un vino blanco seco dotado desde 2003 de la indicación DOCG (“Denominazione di origine controllata e garantita”). Los viñedos autorizados se sitúan en diferentes comunas de la provincia de Avellino: Lapio, Atripalda, Aiello del Sabato, Santo Stefano del Sole, Montefredane, Grottolella, Mercogliano, Monteforte Irpino, Ospedaletto d’Alpinolo, Montefalcione, entre otras. El Fiano di Avellino es uno de los mejores vinos blancos de la región, posee color amarillo claro con tonalidades verdosas, más o menos intenso con aroma afrutado y sabor fresco. Es uno de los pocos blancos que puede envejecer, tiene potencial para desarrollarse en la botella durante varios años tras la cosecha. Cuando es joven, tiene un sabor intenso y aromático con notas a miel; con el tiempo desarrolla sabores más picantes y notas a nuez. Las nuevas técnicas de vinificación han puesto su énfasis en limitar la oxidación y preservar la frescura, mejorando la calidad del fiano a lo largo de los años.
La cocina campana varía según la región y dada su amplitud haré un breve resumen. La pizza en su aspecto y sabor moderno fue concebida en Nápoles, siendo la Margarita una de las más famosas del género de la Pizza Napolitana.
Existen variantes como la pizza fritta, el calzone y la pizza marinera. Los napolitanos estuvieron entre los primeros europeos que usaron el tomate no sólo como planta ornamental sino también como alimento. Son muy famosos en Campania y en toda Italia los quesos “mozzarella di bufala” (elaborada con leche de bùfala), “fior di latte” (mozzarella de leche de vaca), “ricotta” de leche de oveja o de búfala, “provolone” de leche de vaca y “caciotta” confeccionada con leche de cabra. Entre los platos de mar los más típicos son la “insalata di mare”, la “zuppa di polpo” (sopa de pulpo), “zuppa di cozze” (sopa de mejillón) y el “pesce spada” (pez espada) a la plancha; un plato característico son “frittelle di mare” (buñuelos con alga posidonia comestible) y “alici marinate” (anchoas frescas en aceite de oliva).
En Campania se producen los sabrosos limones de Sorrento con los que se produce el lemoncello y la “delizia de limone”!! Otros dulces muy típicos napolitanos son el “babà” servido con ron o limoncello bizcocho que se encuentra en versión grande o mini y la “sfogliatella” una masa de hojaldre rellena con ricota, crema pastelera o nutella. Una de mis mesas preferidas “fatta in casa”: prosciutto crudo, mozzarella de bùfala…y un buen Greco di Tufo!.
Fuentes bibliográficas:
https://es.wikipedia.org/wiki/Campania
http://www.italia.it/es/descubre-italia/campania/poi/sitio-arqueologico-de-paestum.html
http://www.italia.it/es/descubre-italia/campania/avellino.html
http://www.lavanguardia.com/vida/20160907/41160769392/secreto-longevidad-sur-italia.html
http://www.geoplan.it/luoghi-interesse-italia/monumenti-provincia-avellino/cartina-monumenti-avellino/monumenti-avellino-torre-dell-orologio.htm
http://www.agendaonline.it/avellino/articoli/barbaratorre.htm
cittanuova.it
cilentiamoci.it
http://www.repubblica.it/cronaca/2014/01/31/news/processione_candelora_femminielli-77344607/
http://www.scattidigusto.it
http://www.bavette.es/pequena-reposteria
Nota de la autora: “No he recibido ningún tipo de compensación (económica o no) por escribir este artículo, no tengo conexión material con las marcas, productos o servicios que he mencionado y mi opinión es independiente”
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Muy linda nota. me sirvió mucho, ya que planeo viajar a la region de campania en mi próximo viaje a Italia.
Gracias Maria Cecilia.
Nos alegra que te sirva Gonzalo! Si tienes cualquier duda pregunta y Cecilia Puppo te contestará gustosa. Saludos y gracias por seguirnos
Hermosa nota!!!! que bellisima pelicula….!!!! gracias por llevarme a traves de la nota!!!
Muchas gracias a ti Cristina por leernos y por dedicarnos estas palabras.
Se lo transmitimos a Cecilia, la autora.
Un abrazo.
Cristina, como te dice José Luis muchas gracias por tus palabras. Es una zona bellísima ¡Ojalá puedas visitarla si es que no la conoces! Comprobarás la nobleza del lugar, su historia, sus costumbres y su gente…
¡Palabras como las tuyas nos motivan y dan sentido a El Viajero Accidental! Gracias, Cristina.