Llevaba tiempo leyendo publicaciones sobre el Faro de Punta Nariga y sobre el hecho de que es el faro más moderno de toda la costa de Galicia porque comenzó a funcionar en 1998 ¡Así que hace unos días me fuí a conocerlo y hoy os lo cuento!

Se encuentra, como su propio nombre indica, en la Punta Nariga en plena Costa da Morte. En la parroquia de Barizo, concretamente, a unos 11 km de Malpica de Bergantiños que es el concello al que pertenece.

El Faro de Punta Nariga fue diseñado por el arquitecto César Portela. Este arquitecto pontevedrés fue Premio Nacional de Arquitectura en 1999 por el edificio de la estación de autobuses de Córdoba. Es el autor de otras edificaciones conocidas como el Museo del Mar de Vigo, el Auditorio Mar de Vigo o la Domus de A Coruña, en este último caso junto con el arquitecto japonés Arata Isozaki. Si os fijáis son construcciones que tienen un sello propio con ciertas características en común.

 

El faro de Punta Nariga tiene 3 partes bien diferenciadas que son dos bases triangulares y la torre en sí. Las bases triangulares sobre las que se asienta el faro están construidas con granito gris de Mondariz y lo que es el fuste es de granito rosa de Porriño, sobre el que se apoya un torreón de unos tres metros y medio rodeado por un mirador acristalado y rematado por la linterna que alcanza los 4’5 metros. Teniendo en cuenta que está construido sobre rocas, la construcción alcanza unos 50 metros sobre el nivel del mar lo que le permite que la señal lumínica tenga un alcance de 22 millas (unos 41 km).

La primera de las bases triangulares simula la proa de un barco de piedra adentrándose en el mar. Da la impresión de que le planta cara al mar y parece que va a surcar las olas. Como si fuera un mascarón, en esa proa encontramos una escultura de bronce obra de Manolo Coia. La escultura es una mezcla entre humano y gaviota a punto de echar a volar. Se trata de un atlante de bronce y su nombre es “O soño do emigrante” (el sueño del emigrante). Al otro lado del Océano Atlántico está América que era la tierra con la que soñaron y a la que emigraron muchos gallegos en épocas de necesidad.

 

Merece la pena subir la escaleras estrechas y empinadas que conducen a la segunda base triangular porque dan acceso a un mirador al Atlántico. Desde ahí arriba podremos disfrutar de unas vistas que comprenden desde las islas Sisargas al este hasta la punta del Roncudo al oeste.

 

El faro se encuentra rodeado de rocas con curiosas formas, modeladas por la acción de la erosión del agua y el viento. Es divertido jugar a imaginar animales porque las formas que ofrecen son de lo más originales ¡Prueba a echarle imaginación porque es divertido! La construcción se encuentra mimetizada con el entorno. Es un buen ejemplo de integración total de la arquitectura con el paisaje natural en el que está.

 

La verdad es que cuesta alejarse del Faro de Punta Nariga sin echar la vista atrás y mirarlo una vez más. Merece la pena un último vistazo… antes de marchar. Por cierto, si os gusta el senderismo os diré que el faro de Punta Nariga es el primero por el que se pasa en la etapa 1 de “O camiño dos faros“. Se trata de una ruta de senderismo de 200 km que une Malpica con Finisterre, por A Costa da Morte bordeando el mar.

 

 

Y como ya sabéis que nos gusta descubrir y recomendar buenos sitios para comer, os aconsejo que si lo planificáis con tiempo reservéis para comer en As Garzas en Barizo.

¡Si te apetece seguir de tour por A Costa da Morte pincha aquí! ¡Y si lo que te gusta es el deporte de aventura puede interesarte una excursión a la cascada de Ézaro en kayak como la que te mostramos aquí!

¡Hasta pronto! ¡Seguiremos recorriendo Galicia de cabo a rabo!

 

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