Los viajes que no fueron y serán. Londres, Cantabria, Cangas de Morrazo y seguramente Praga y Budapest.

Todo eso no fue, no pasó, se quedó en suspenso. Otra realidad tomó su lugar, la realidad de un despacho improvisado en la habitación de mi hijo Gonzalo que está ahora en Londres.

 

Mi despacho

 

Ese hijo al que íbamos a visitar el mismo fin de semana que se declaró el estado de alarma. El mismo que ahora cuelga fotos de un Londres desierto en su cuenta de Instagram.

 

Los viajes que no fueron y serán - Diarios de la cuarentena

Seven Dials

 

El mismo Gonzalo con el que jugamos al Trivial virtual desde el salón de nuestra casa, mientras él está en King’s Cross.

 

Trivial virtual

 

En ese salón de casa Sofía, mi hija, y yo nos mantenemos en forma. Bueno, yo sudo y mantengo la dignidad mientras ella se pone cada día más guapa. Y aparte de ponerse más guapa, en ese mismo salón estudia todos los días, en su mini universo con los cascos puestos, eso sí siempre alegre.

 

Los viajes que no fueron y serán - Diarios de la cuarentena

En forma con YouTube

 

Estos días me están permitiendo conocer nada menos que a La Pulga de la Montaña. Así es como llama Marcos Pereda al gran Vicente Trueba, el ciclista de Torrelavega, perdón, de Sierrapando. De esto y más hablaremos con Marcos en el Viajero Accidental.

 

 

El parque que tenemos enfrente de casa es realmente el sitio de mi recreo. Por él me acompaña Zira, que es feliz porque nunca había estado rodeada de la familia durante tantas horas al día.

 

 

Ha tenido que llegar esta maldición para que descubramos cosas que se podían ya hacer. Y hemos puesto en marcha los aperitivos virtuales, algo que habrá que mantener.

 

 

Raquel, mi mujer, me mantiene aferrado a la realidad. Pero es ahora en estos días que estoy más tiempo con ella, que me doy cuenta que las cosas solo son reales para mí cuando ella me las cuenta, o yo se las cuento a ella. Aunque a veces le cuente pocas…y tarde.

Todo esto que he contado ha sustituido a los viajes que no fueron y serán. No echo de menos esos viajes, sé que los haré antes o después. A cambio he ganado todo esto.

 

Más de José Luis Conde en El Viajero Accidental.

 

Nota del autor: “No he recibido ningún tipo de compensación (económica o no) por escribir este artículo, no tengo conexión material con las marcas, productos o servicios que he mencionado y mi opinión es independiente”

Loading