Te invito a que olvides el tiempo, te relajes y disfrutes de Soria y su románico a orillas del Duero.

Románico, paisajes naturales, placeres gastronómicos y buen vino nos hicieron pasar un fin de semana muy especial; hicimos el recorrido de la mano de un sanestebeño que con su entusiasmo y orgullo por su pueblo nos hizo sentir como en casa.

San Esteban de Gormaz

Empezamos el recorrido por San Esteban de Gormaz, pintoresco municipio de la provincia de Soria, de unos 3000 habitantes; declarado Conjunto Histórico-Artístico, en1995.

En San Esteban han tenido lugar acontecimientos de destacada relevancia debido a su situación estratégica a orillas del río Duero, frontera natural entre las tierras musulmanas y cristianas en tiempos remotos. Fue Rodrigo Díaz de Vivar, El Cid, quien después de innumerables batallas, expulsó definitivamente a los musulmanes de la villa en el siglo XI.

Cruzamos el Puente Medieval de piedra sobre el Duero que con sus dieciséis ojos es uno de los elementos que marcó la Historia del municipio, al ser uno de los pocos pasos que cruzaba el río Duero en el medievo. Seguramente se fundamenta en otro de origen romano, puente romano, que ha sido continuamente reparado y conservado a lo largo del tiempo.

El Arco de la Villa, uno de los principales accesos actuales a la Plaza Mayor (de forma cuadrada, alberga el ayuntamiento y es porticada; sus soportales han sido catalogados de interés histórico), fue la puerta de entrada de la antigua muralla.
La Calle Mayor atraviesa lateralmente la Plaza Mayor y continúa con las galerías porticadas en dirección Oeste. A lo largo de la calle, se reconocen las casas más ilustres de la Villa, con edificios blasonados con escudos pertenecientes a familias nobles. Destaca el conocido Cuartel Viejo (utilizado como cuartel de la Guardia Civil en la primera mitad del siglo). En su fachada, se reconocen: el escudo, diversas lápidas romanas y un sillar decorado visigodo.

Soria y su románico

Puerta de la Villa

San Esteban de Gormaz, cuenta con dos edificios declarados Bien de Interés Cultural:

La Iglesia Románica de San Miguel, del Siglo XI, construida en 1081, es la iglesia más antigua, conservada, de Soria y su románico y uno de los monumentos de mayor participación musulmana. Planta de una sola nave, rematada en ábside semicircular, con presbiterio (con pinturas murales góticas, del siglo XIV, representan escenas religiosas: los doce apóstoles, la coronación de San Martín, un ángel con un escudo, un santo a caballo, el sueño de Adán y San Cristóbal), galería a mediodía y torre, levantada posteriormente.

Iglesia de San Miguel

Destaca su galería porticada, la primera construida en Soria. Consta de varios arcos que se apoyan en columnas cuyos capiteles se hallan decorados exóticamente. En ellos aparecen varios personajes con kaftanes y turbantes en diferentes escenas. El trabajo realizado por el maestro cantero demuestra una talla ruda pero cautivadora, una característica que se hace extensible a los canecillos que sustentan la cornisa. Como dato curioso, los especialistas discuten acerca de la posibilidad de que se trate de la primera galería porticada románica de la que se tienen noticias. Conserva dos capiteles, uno con animales afrontados y el otro con una escena en la que un lobo muerde la pierna de un hombre desnudo, símbolo del pecado, mientras que otro con faldellín le sujeta, representando al demonio.

 

 

La Iglesia de Nuestra Señora del Rivero, también románica, del siglo XII, en el ábside destaca la imagen de la Virgen del Rivero, Patrona de la villa. Construida en un altozano que domina desde su pórtico toda la ribera del Duero, se asienta sobre las ruinas de otro templo o, tal vez, como ampliación de éste. En el siglo XVI se incorpora a la galería de la iglesia un arco sepulcral cobijado por un arco plateresco. La galería porticada está compuesta por nueve arcos de medio punto. Las columnas de la galería son sencillas y robustas. En la misma galería se encuentran los escudos de los marqueses de Villena, antiguos señores de la villa. La iconografía de los capiteles es animalista y de inspiración oriental. La nave de la Iglesia está cubierta con una bóveda de lunetos bajo la cual se abren unas ventanas que dan luz a la nave.

Desde la torre de la Iglesia de San Miguel se puede ver el Castillo de San Esteban de Gormaz, uno de los castillos claves, cambió de manos continuamente durante los siglos X-XI. En el siglo XI pasa definitivamente a poder cristiano. La construcción se realizó con sillares labrados, seguramente de procedencia romana.

En las laderas del castillo están ubicadas las bodegas tradicionales, hay catalogadas más de 300, están excavadas en la roca y forman una complicada red de galerías comunicadas entre sí, con estrechas bajadas, respiraderos, bocinos y pasillos, son el resultado de muchas generaciones de tradición y cultura del vino.

 

 

Por el Cañón del Río Lobos

Por la tarde dimos un paseo por el Cañón del Río Lobos declarado Parque Natural en 1.985. Se trata de un profundo cañón calizo formado por una antigua e intensa erosión del río Lobos, recorriendo más de 25 km. de la Provincia de Soria y Burgos. La formación más espectacular es el propio Cañón fruto de la doble acción erosiva y de desgaste.

 

 

Dentro del cañón encontramos la Ermita de San Bartolomé, Siglo XII de estilo Románico-protogótico; la ermita formó parte de lo que en su día fue el Monasterio Templario de San Juan de Otero. En ella se encuentran una magnífica puerta de entrada, canecillos decorados, y un rosetón con ornamentación de figuras esotéricas. Alberga la cruz templaria y la estrella de Sion; en su exterior, tres olmos centenarios y el remanso al pie del río.

 

Soria y su románico

Ermita de San Bartolomé

 

A la mañana siguiente nos dirigimos hacia la Ermita de San Baudelio (Casillas de Berlanga), construida a finales del siglo XI, de estilo prerrománico, de influencia mozárabe. Está considerada como la joya más original de la arquitectura prerrománica soriana. En el centro de la nave se encuentra el único pilar, una gruesa columna de la que arrancan ocho arcos de herradura a modo de ramas de palmera. La capilla central se instaló en el ábside, donde además se encuentra una necrópolis rupestre medieval. Las paredes de la ermita estaban completamente cubiertas de pinturas al temple, algunas de esas pinturas se conservan en el propio templo, otras fueron arrancadas y se conservan en varios museos de Boston y en el Museo del Prado. Una auténtica joya que bien merece una visita.

 

 

 

Y llegamos a Berlanga de Duero

Desde allí fuimos a Berlanga de Duero, situada en la hoz del rio Escalote y que se extiende a los pies de su Castillo, siglos XV – XVI, actualmente en ruinas, fue construido sobre una fortaleza musulmana del siglo X de la que no se conservan restos; tuvo un importante papel, junto con la muralla que rodeaba completamente la villa, en la defensa del Duero durante la Conquista Musulmana. De entre los restos que se conservan del castillo, destaca la torre del homenaje.

 

Castillo

 

Uno de los hijos más ilustres de esta villa fue Fray Tomás de Berlanga, descubridor de las Islas Galápagos cuya estatua preside la plaza en al que se encuentra el Palacio de los Marqueses, del siglo XVI, se componía de dos torres, amplia fachada y patio central.

 

 

Destaca la Colegiata de Santa María del Mercado, Monumento Nacional desde el año 1931, de estilo Gótico-renacentista, fue construida en cuatro años (1526-1530) por el arquitecto Juan de Rasines. Su planta consta de tres naves centrales elevadísimas y crucero; fuertes columnas cilíndricas sostienen las bóvedas, de rica tracería. Es una de las mejores iglesias de “planta de salón”, llamadas así por la diafanidad que proporciona al interior la igual altura de sus tres naves y la distancia considerable entre sus esbeltos pilares.

Esta Colegiata fue un ejemplo a seguir para muchas otras iglesias por su concepto del espacio y por la pureza de sus líneas. La capilla mayor, en planta de Cruz griega, está acompañada por ocho capillas cerradas con crucería simple, destacando la de los Coria, de planta octogonal, y el sepulcro central de los Bravo de Laguna, renacentista. Destacan los retablos y tallas de las capillas de Santa Ana y de los Coria de los siglos XV y XVI respectivamente.

 

Soria y su románico

Colegiata de Santa María

 

El Altar Mayor está presidido por la talla de Nuestra Señora del Mercado, escultura tardorrománica del siglo XII. En uno de los muros permanece colgado un cocodrilo disecado que fue traído a Berlanga por Fray Tomas desde las Islas Galápagos descubiertas por él.

Extramuros de la villa se alza el Hospital de San Antonio, fue hospital de enfermos y albergue de peregrinos, del segundo cuarto del siglo XVI, solo queda la puerta de acceso, la chimenea de las cocinas y la capilla de la Virgen de las Torres del siglo XIII.

Recorrer la Calle Real, con varias casas nobiliarias blasonadas, hasta llegar a la Plaza Mayor, típica plaza castellana de la provincia de Soria, cuadrangular, porticada con pilares de madera sobre base de piedra.

 

 

Repusimos fuerzas con una estupenda comida en un restaurante local y regresamos a casa cargados de energía y con ganas de seguir conociendo esta tierra donde “…Castilla cambia de color, el paisaje se torna cálido y muestra limpios horizontes a su paso, interrumpidos sólo por la majestuosidad del Duero que los atraviesa mansamente….”

Links incluidos en este artículo:

San Esteban de Gormaz

La Iglesia Románica de San Miguel

La Iglesia de Nuestra Señora del Rivero

Castillo de San Esteban de Gormaz

bodegas tradicionales

Cañón del Río Lobos declarado Parque Natural en 1.985

Berlanga de Duero

Ermita de San Baudelio (Casillas de Berlanga)

Fray Tomás de Berlanga, descubridor de las Islas Galápagos

Colegiata de Santa María del Mercado

 

Más sobre Castilla y León en El Viajero Accidental:

 

Nota de la autora: “No he recibido ningún tipo de compensación (económica o no) por escribir este artículo, no tengo conexión material con las marcas, productos o servicios que he mencionado y mi opinión es independiente”

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