Fecha última actualización 18/02/2021 por El Viajero Accidental
Cuando gracias al blogtrip organizado por Radioviajera me dirigía a Palencia desconocía sus muchos atractivos. La ciudad me sorprendió y sobre todo las proporciones de su catedral, tan poco conocida, quizás debido a la fama de su vecina catedral de Burgos.
Al ver por primera vez la Catedral de Palencia, la primera impresión es engañosa, hay que rodearla para ser consciente de su inmensidad. Sorprende el dato de que es la tercera más grande de España tras la de Toledo y la de Sevilla. Cuenta con 130 metros de largo por 50 de ancho, con una altura nada desdeñable de 43 metros.
Las catedrales más grandes: Palencia, Toledo y Sevilla
Su construcción abarcó los siglos XIV y XV. Se edificó sobre una construcción anterior de estilo románico, de la que apenas se conservan vestigios. Ya antes en ese lugar hubo un cripta visigoda, que se encuentra en el subsuelo.
La Catedral de Palencia es de estilo gótico, pero dada la prolongación de las obras también tiene elementos renacentistas.
Fue sometida a una restauración a principios del siglo XX y en este año acaban de empezar a acometerse obras con la vista puesta en 2021, cuando se celebrará el séptimo centenario de la colocación de la primera piedra de la catedral palentina.
Al recorrer el espacio exterior a la catedral tuve la sensación de que me encontraba ante un carrusel. Acostumbrada a presenciar catedrales con fachada principal, laterales y su parte trasera, me encontré circunvalando un edificio de tres fachadas. Da la sensación de estar ante una inmensa “carpa” que contiene un bello interior pero cuyos laterales se han ido armando de forma no siempre ordenada. La catedral no tiene una fachada principal, propiamente dicha, las tres fachadas con sus cinco puertas van ordenando ese universo casi circular.
Está claro que la orografía de Palencia no ha sido la que ha puesto trabas para la construcción de la catedral, sino que debemos buscar en otros factores para entender la forma de “la bella desconocida”, tal y como la llaman sus paisanos.
Los dos cruceros construidos en la catedral de San Antolín.
La explicación hay que buscarla en los distintos procesos constructivos que se van produciendo. Inicialmente la planta del edificio comienza sobre un crucero diseñado a tal efecto pero posteriormente se construye un segundo crucero más monumental. Debido al doble crucero, la catedral pasa a contar con cinco puertas que se distribuyen en tres fachadas.
A la nave central se le han ido añadiendo construcciones: primero se adosó el Claustro que se comenzó a construir a mediados del Siglo XV y precisó más de siete décadas para su finalización. Varios siglos después, en el S.XVIII, se adosa la capilla del Monumento -de forma octagonal y cubierta con un chapitel de pizarra- que resulta fácil de identificar porque se asemeja a un azucarero con su tapa. Ha sido recientemente restaurada .
Los dos anexos por dentro lucen con esplendor pero exteriormente el claustro nos recibe con un paredón y la capilla sobresale de forma excesiva en la fachada.
Tras esos procesos constructivos, en Palencia van más allá de la cuadratura del círculo, con la catedral han conseguido redondear el cuadrado.
Ya que tenemos tres fachadas, ¿cual ponemos en el imán o souvenir que representa a la ciudad? Vamos a pensarlo
La fachada meridional o fachada sur
Es la más llamativa, cuenta con una gran torre con un reloj y dos puertas. La primera, a la derecha, Puerta del Salvador o de los Novios y la segunda, a la izquierda, la Puerta del Obispo o Santa María, esta última bastante deteriorada.
La fachada occidental o fachada orientada al oeste
Está medio “tapada” por la Capilla del Monumento, que se construye anexa por lo que sobresale del contorno de la catedral. En ella se encuentra la puerta de San Antolín.
La fachada septentrional o fachada orientada al norte
Es la más recta del edificio, de escasa ornamentación cuenta con dos puertas: de los Canónigos o Puerta Nueva, a la derecha, y la Puerta de los Reyes o San Juan a la izquierda.
En el este del edificio están todas las capillas hexagonales.
¡Difícil decisión escoger el souvenir!
Nosotros hicimos la visita con ayuda de un guía local, nos fuimos fijando en detalles y curiosidades singulares que no le faltan. Es más, os propongo un juego, en el exterior de la catedral, en una de sus puertas, si miramos con atención nos encontraremos con “dos aliens”. Es fruto de una restauración realizada en 1995, la película de ciencia ficción ya se había estrenado, el restaurador Díaz-Pines se permitió la licencia de realizar el boceto que llevaron a cabo los canteros. Os daré una pista “los aliens” están en la arquivolta exterior de la Puerta de los Reyes, poner atención.
Continuamos con el juego de observación. La catedral ya había sido restaurada a principios del S. XX, ocupándose de la misma el arquitecto Jerónimo Arroyo. Entre las cosas encomendadas figuraba sustituir una de las gárgolas que se había desprendido y el arquitecto tuvo la feliz idea de esculpir a un señor vestido de levita portando una cámara de fotos “de las de fuelle”, es un homenaje a su amigo José Sanabria, conocido fotógrafo de principios del siglo XX. A partir de entonces en la catedral comparten lugar las gárgolas del siglo XIV (unicornios, esqueletos, leones alados…) con un fotógrafo del S. XX.
Otra curiosidad de la catedral es que en ella se casaron los primeros Príncipes de Asturias. El rey castellano Juan I, harto de las luchas dinásticas entre las casas de Castilla, decidió otorgar a su hijo primogénito, Enrique, el título de Príncipe de Asturias como heredero de la corona de Castilla y casarlo con solo 10 años para unir familias.
El título de Príncipe de Asturias todos lo vinculamos a la Reconquista, pero en realidad nada tiene que ver con la misma. Adjudicar un título al heredero de la corona era práctica habitual en Inglaterra, Príncipe de Gales, y en Francia, Delfín, siendo el rey Juan I, quien lo incorporó a la corona de España
Existe la creencia popular de que de Enrique III y Catalina de Lancaster entraron para casarse por la Puerta de los Novios. Pero no lo vemos posible ya que el enlace tuvo lugar en 1388 y la puerta se construye en el siglo XV. Por lo que… casar, casaron, pero por esta puerta no pasaron.
Esta puerta es la que se usa como acceso habitual hoy en día.
La torre impresiona como “tosca” para ser gótica y es que en realidad es una antigua torre defensiva. Hoy pasa los días convertida en “campanario” y hasta mediados del siglo pasado dio cobijo al campanero que tenía allí su vivienda. En la espadaña de la torre se sitúan dos campanas idénticas -una detrás de otra- la primera llamada Cimbalillos y la otra, de grandes proporciones, el Zarambombón del reloj que está ahí desde la época del emperador Carlos V.
Las campanas de la catedral son en total 11, las tres ya mencionadas, otra colgada en una segunda espadaña situada en el tejado, llamada campana del Viático o de difuntos, y un grupo de siete en el patio de campanas, que ha sido rehabilitado por alumnos de la escuela taller de Palencia y puede ser visitado por los turistas.
A todas estas curiosidades se le añade el tamaño del templo. No me parece que esté mal ocupar el tercer puesto dentro de las catedrales más grandes de España. Hay que tener en cuenta, además, que en nuestro país hay 88 catedrales, de los cuales 16 están en Castilla y León.
¡Animaos a conocer la catedral de Palencia! El edificio tiene alma de transformer: la cripta se convierte en templo visigodo, el templo da lugar a una primera sede catedralicia, el estilo románico de la misma se convierte en gótico. Los componentes de la catedral se transforman aunque también se conservan, no todos, pero la cripta de San Antolín ahí sigue, al igual que columnas y capiteles románicos colocados en la capilla mayor. Y si podéis apuntaros a una visita guiada por la Catedral, no lo dudéis.
Nota de la autora: “No he recibido ningún tipo de compensación (económica o no) por escribir este artículo. No tengo conexión material con las marcas, productos o servicios que he mencionado y mi opinión es independiente”
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