La celebración de la noche de San Juan en A Coruña, declarada Fiesta de Interés Turístico Internacional, es algo que por muchos años que la veas nunca deja de sorprenderte. Llevo 26 años en esta ciudad y siempre que la vivo vuelve a dejarme boquiabierta. A noite de San Xoan 2018 será recordada como una de las más calurosas de su historia, podría haber titulado el artículo “Una noche de San Juan sin chaquetas”, de ésas pocas que en la ciudad herculina puedes bajar sin la “rebequita” en la mano, por si acaso… y creo que no exagero si digo que también, probablemente, sea recordada como una de las mejor organizadas.


Una vez más el fuego y el mar fueron los protagonistas de esta noche mágica en la que se da el pistoletazo de salida al verano, con la celebración de su solsticio. Por un día son muchos los que pueden presumir de tener una pequeña parcela en primera línea de playa al borde del mar, y este año con la facilidad de que al cuadrar en sábado se podía disfrutar desde primera hora de la mañana y con la suerte de tener un día espléndido.

 

Según va transcurriendo el día avanzan todos los preparativos, algunos de los cuales se han iniciado varios días antes. Entre ellos, se prepara el puesto de mando en La Coraza que coordinará los trabajos del dispositivo de seguridad, integrado este año por 374 efectivos.

En la edición de 2018, en la iniciativa “Móllate” para el reciclaje de residuos han participado 375 alumnos de diferentes centros escolares con objeto de concienciar a los asistentes respecto a la importancia de recoger la basura y no contaminar. Esta idea quedaba bien reflejada en el mensaje que se emitía por megafonía desde media tarde, aludiendo a las reglas a seguir en esta celebración: chegar, encher, saltar, disfrutar e recoller. Reciclar vidrio estaba premiado y en los “rascas” que entregaban cuando depositabas vidrio en los contenedores instalados a lo largo del paseo para este fin, te podía corresponder desde unas entradas para el aquapark de Cerceda hasta una bicicleta. En la iniciativa “Móllate” también han participado supermercados, como es el caso del que nos invita en sus sloganes a vivir como galegos, que repartían entre sus clientes, según pasaban por caja, bolsas de papel conmemorativas. Ciertamente creo que este San Juan podría calificarse como uno de los más respetuosos con el entorno.

Se montan los escenarios desde los que sonará la música para animar la fiesta, y los medios de comunicación buscan los mejores lugares para transmitir cómo se vive San Xoan en A Coruña, la ciudad en la que elegí vivir hace ya unos cuantos años.

 

Es curioso observar según avanza la tarde y la gente va adecuando sus parcelas con la preparación de las hogueras, que debían tener una separación mínima de 5 metros entre unas y otras, como en la playa del Orzán predominan las pandillas de jóvenes, mientras que en la de Riazor se entremezclan familias, jóvenes, asociaciones… En la edición de 2018 hemos visto mesas con una preparación exquisita para tratarse de cenas en la playa y parrillas dignas del mejor chiringuito playero. El Ayuntamiento repartió 120 toneladas de leña desde las 19 horas y la seguridad se encargó de hacer cumplir la prohibición de utilizar palés, y de no bajar botellas de vidrio a la playa, que puedan suponer un peligro para los bañistas a la mañana siguiente.

Testigo de todo ello es la falla, plantada en la playa de Riazor, que espera para ser prendida a las 12 de la noche. En esta ocasión se trata de una obra de David Romero que aglutina distintos acontecimientos acaecidos durante los últimos meses. En la falla de este año pudimos ver a un pensionista como muestra de las movilizaciones que han protagonizado para reclamar sus derechos,  a María Pita recordando la trascendencia del pasado 8 de marzo, al alcalde de la ciudad y a Seedorf y nuestro Depor, en alusión a su descenso a segunda división.

 

Una tendencia que va creciendo año a año es que San Juan no se vive sólo en los principales arenales de la ciudad sino que también se traslada a los barrios donde se organizan hogueras, parrilladas, verbenas. Se cierran calles al tráfico y los coruñeses tomamos las calzadas para saborear los manjares típicos de esta noche: las sardinas y el pan, a los que se añade desde hace algunos años el churrasco, e incluso algún pulpo despistado…

 

A las 12 de la noche los fuegos artificiales invadieron el cielo coruñés y las jugadoras del equipo de fútbol sala Viaxes Amarelle, recién ascendidas a primera división, se encargaron de prender la falla. A partir de ese momento todas las hogueras iluminan ya la silueta de las playas y continúa el disfrute de la noche más corta del año, pero no por ello menos intensa.

 

Este año el Deportivo quiso aportar su grano de arena organizando una fiesta con DJ a la altura de la fuente de los surfistas, donde presentó su 3ª equipación inspirada en esta noche tan simbólica para esta ciudad y su nuevo autobús. Y como sucede ya desde hace varios años, fueron muchos los que soltaron sus globos de papel portando sus deseos…

 

El Viajero Accidental estaba invitado a una hoguera en la explanada de la Casa de los Peces, así que allí se dirigió para saltar la hoguera y espantar todo lo malo para nosotros y todos vosotros… teniendo como testigo mudo a la Torre de Hércules.

 

¡Meigas fora! Hasta pronto

 

Nota de la autora: “No he recibido ningún tipo de compensación (económica o no) por escribir este artículo, no tengo conexión material con las marcas, productos o servicios que he mencionado y mi opinión es independiente”

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