Hace unos días un grupo de amigas nos juntamos en Madrid para volvernos a ver después de una temporada de no poder viajar juntas. Dos de nosotras nos conocemos desde la época universitaria y el resto se han ido agregando a lo largo del camino. Todas somos aficionadas a las risas, las comidas y demás jolgorios.

Paseando por las calles de Madrid nos llevamos una grata sorpresa. Sus calles están llenas de Meninas. Al principio pensamos que era algo anecdótico pero después cada lugar que visitábamos disponía de su Menina. Si os acercáis a Madrid en estos días, os encontraréis con Meninas a diestro y siniestro, si te fijas en la placa que identifica a su autor seguro que te sorprenderás, la iniciativa busca una reinvención y reinterpretación de las protagonistas más famosas de la obra pictórica.

Todos conocemos el cuadro de Velázquez, las Meninas ya forman parte de nuestro inconsciente colectivo, pertenecen a nuestra seña de identidad. Es frecuente encontrarnos con reinterpretaciones más o menos clásicas o vanguardistas de las Meninas, a veces convertidas en figuras de porcelana o en tazas de desayuno, otras veces en láminas para enmarcar, en camisetas y demás merchandinsing que se ha desarrollado alrededor de ellas.

Lo que quizás es menos conocido es el papel histórico que le tocó jugar a la infanta Margarita Mª Teresa, que fue “fotografiada” (algunos dicen que el cuadro de Velázquez se asemeja a una fotografía) junto con sus damas de compañía llamadas meninas y acompañada de diversos personajes incluido el autor del cuadro.

Las mujeres, para la nobleza en el S. XVII, eran moneda de cambio entre las familias que ostentaban el poder; con ellas se sellaban alianzas que interesaban y convenían a la casa real. La infanta Margarita Mª Teresa no fue una excepción, todo la contrario la casaron, siendo muy joven, con su tío materno para cohesionar la dinastía de los Habsburgo, se pretendía unir la rama austriaca de la familia con la rama española.

Antes de marchar a Austria, Margarita Mª Teresa fue objeto de múltiples retratos, alguno de ellos solicitado por su futuro esposo Leopoldo I, realizados por los pintores ilustres de la época, destacando entre ellos Diego Velázquez.

Una vez en Austria, la pobre infanta comienza tener hijos a los quince años y fallece a los veintidós por las secuelas de su cuarto parto. El heredero que estaba obligada a dar no vivió más allá de un año, dos bebés no sobrevivieron y solo una hija llegó a la madurez.

Las meninas eran las asistentes personales de la infanta, esta labor era ocupada por mujeres de noble nacimiento, constituyendo un honor y un privilegio llegar a ese puesto. Las meninas pintadas por Velázquez son Isabel de Velasco y Mª Agustina Sarmiento de Sotomayor, ambas hijas de gentiles hombres al servicio del rey, que asisten a la infanta hasta que ésta cumple su papel histórico y marcha a Austria para convertirse en la Emperatriz consorte del Sacro Imperio Romano Germánico. Las meninas, las hijas de aquellas familias ilustres, tras la partida de la infanta también contraen matrimonio.

Hoy aquellas meninas que acompañaban a la infanta en la corte se han reinventado en Madrid. Numerosos artistas han creado su menina para convertir a Madrid en un museo callejero.

La iniciativa surge del artista mejicano Antonio Azzato, reconstruir la obra de Velázquez actualizándola y anclándola a Madrid. El artista plantea una menina como un lienzo en blanco. La pregunta del autor de la iniciativa ante la menina en blanco es simple: “¿Que es Madrid para ti?”. De esta manera cada menina porta un mensaje individual.

Este interesante proyecto involucra a artistas ya consagrados pero también integra a artistas emergentes, especialistas en distintas áreas creativas, han participado escultores, pintores, artesanos, diseñadores, cantantes, toreros, modistos, actores, cocineros…

Las esculturas con una altura de 1,80 metros están emplazadas en distintos lugares de la capital, ancladas sobre una peana de 200 kilos, y portando cada una su mensaje.

Te recomiendo pasear por el centro de Madrid, cuando menos te lo esperes una menina saldrá a tu encuentro. Puerta del Sol, Callao, Princesa, Recoletos, Plaza Colón, Paseo del Prado, Alcalá, Plaza de la Independencia, Plaza Mayor, Plazo de Pedro Zerolo, Serrano, Colón… muchas son las ubicaciones. Quizás quieras sorprenderte pero si no es así la página de Madrid Turismo puedes encontrar las ubicaciones exactas.

 

Pueden contemplarse hasta la primera semana de julio, después se subastarán y los beneficios se destinarán a obras de interés social. Lo que ya se ha conseguido es que las imágenes de las Meninas ya se han quedado en las mentes de los residentes y visitantes de Madrid.

 

PÁGINAS WEB UTILIZADAS O CONSULTADAS:

www.somoschueca.com

 

Nota de la autora: “No he recibido ningún tipo de compensación (económica o no) por escribir este artículo, no tengo conexión material con las marcas, productos o servicios que he mencionado y mi opinión es independiente”

 

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