Hola lectores, soy yo nuevamente, Cecilia la argentina. Esta vez es para contarles mi experiencia en un “piccolo paese” llamado Alberobello, un lugar de hadas y duendes, un lugar encantado.


La particularidad de este lugar es que tiene unas edificaciones cilíndricas pintorescas con techo cónico denominadas “trullo” distribuidas en todo el Val d’Itria, pero concentradas en Alberobello y que en su conjunto forman un paisaje urbano muy particular. Los “trulli” de Alberobello fueron declarados Patrimonio de la Humanidad por la Unesco en el año 1996.

 

Origen de los Trulli

Alberobello («Ajarubbèdde» en apulo-barese) es una ciudad pequeña, un municipio italiano de aproximadamente 11.000 habitantes sito en la provincia de Bari, región Puglia. Alberobello en italiano es la conjunción de dos palabras “albero” árbol “bello” bello relacionado con la frondosa vegetación de la zona con tierra cultivable; pero en realidad el nombre actual deriva del latín medieval de la región “silva arbolris belli”. Alberobello era a principios del siglo XVI un pequeño feudo bajo el dominio de los Acquaviva de Aragona (condes de Conversano) que fue poblándose de campesinos dispuestos a trabajar la tierra fértil. Los condes autorizaban a los colonos a construir sus casas de piedra seca pero sin cemento, para poder ser derruidas en caso de inspección regia (inspección ordenada en 1644 por el duque Caracciolo de Martina Franca), ya que existía desde el siglo XV una norma en el Reino de Nápoles denominada “Prammatica de Baronibus” que exigía el pago del tributo para el establecimiento de una aglomeración urbana. De esta forma, los trulli eran construcciones precarias de fácil demolición que se destruían para evitar el pago de dicho impuesto.

Debido a que sólo podían utilizar piedras, los campesinos encontraron la configuración más simple y sólida en la forma redonda con techo de cúpula auto-portante compuesto por círculos de piedra superpuestos. Los techos abovedados de los trulli eran embellecidos con pináculos decorativos, cuya forma está inspirada en elementos simbólicos, místicos y religiosos. Estos pináculos permitían identificar al artesano. En base a la calidad de la factura del pináculo se podía entonces reconocer no sólo la habilidad artesanal del constructor sino también el valor de la construcción.

 

Un mayor gasto en la construcción del trullo permitía por lo tanto individualizar las más pudientes de aquellas más pobres. Los símbolos pintados sobre los techos de los trulli a menudo asumían un significado religioso; a veces podían representar los signos del zodíaco. Debido a que a Alberobello se le negó por un largo período el reconocimiento oficial por parte de los condes de Conversano, los pináculos y símbolos pintados formaban juntos una especie de identificativo ciudadano.

El 27 de mayo de 1797 el rey Fernando IV de Borbón emitió en Tarento un decreto mediante el cual elevó a la pequeña villa a la categoría de ciudad regia, liberándola de la servidumbre feudal.

Trulli más característicos

El trullo más grande del poblado es el llamado «Trullo Sovrano» (trullo soberano). Este edificio de dos plantas, hecho construir por la familia Perta en la mitad del siglo XVIII y convertido en museo cuyo interior se puede visitar, ha sido arreglado conforme el gusto de la época y reconstruido gracias a los testimonios de los más ancianos habitantes alberobelleses. Durante el verano, el Trullo Sovrano alberga espectáculos teatrales, conciertos de orquestas o jazz y encuentros de cultura y poesía.

En el distrito o rione Monti, en via Monte Nero se encuentran los trulli siameses  caracterizados por una forma particular de techo constituido por dos conos unidos. Los dos conos se comunicaban antiguamente por una puerta. Actualmente son dos locales separados cada uno con su puerta de ingreso sobre calles diferentes. Esta particularidad da lugar a una leyenda popular según la cual cada trullo pertenecía a dos hermanos que vivían juntos. Ambos se enamoraron de la misma chica, la cual comprometida con el mayor, se casó con el menor. El hermano mayor los echó de la casa, pero el menor pretendía su parte del trullo. El trullo fue entonces dividido y las entradas fueron separadas sobre diferentes calles de modo que el hermano mayor no tuviera ya relación ninguna con los dos amantes.

Sobre la cumbre del rione Monti se encuentra la iglesia de San Antonio, también ella con forma de trullo. Fue edificada entre 1926 y 1927 sobre un terreno donado por una ciudadana de Alberobello a los sacerdotes guanellianos. La cúpula tiene forma de trullo y se integra perfectamente con los edificios que la rodean. La iglesia tiene planta de cruz griega y la cúpula tiene 21 metros de altura. La iglesia ha pasado una completa restauración en el año 2004 que le ha devuelto su antiguo esplendor.

Iglesia de San Antonio en Alberobello

Iglesia de San Antonio en Alberobello

Algunas vivencias

Yo no tenía idea de la existencia de esta ciudad hasta que mi amiga Luz Picos Freire subió fotos al Facebook del lugar. Y me enamoré inmediatamente, porque es un lugar realmente encantador. Así fue que busqué en diferentes sitios de internet y en uno de ellos proponían como una de las cosas que uno no puede dejar de hacer antes de morirse: “dormir en un trullo de Alberobello”. Así fue que nos hospedamos en un trullo del Typical Resort in Trulli , realmente una experiencia única. Pero la historia fue llegar al hospedaje, toda una odisea que paso a detallar. Llegando a Alberobello el GPS del coche nos iba guiando y adentrando en la ciudad, hasta que súbitamente sugirió girar a la izquierda por una calle pequeña en cuyo inicio tenía una valla con un cartel de “acceso vietato” (prohibido pasar) al que por supuesto, como argentina que soy, no le presté atención. Pasamos y a medida que  nos adentrábamos las calles se iba haciendo cada vez más pequeñas, hasta que pasé por una muy estrecha que cuando vi hacia atrás no sabía cómo lo había logrado. Dejamos estacionado el coche y muy nerviosas nos dirigimos al hotel. Cuando llegamos le explicamos al chico que atendía en el mostrador, Alessio, lo que nos había sucedido. Me dijo que por dejar el coche en el caso histórico, ponían multas abultadas. Y yo le dije “no puedo mover el coche de donde está, lo pude entrar pero no lo puedo sacar!!!”. Alessio se apiadó de mí y fue con nosotras al lugar donde dejamos aparcado el coche con todas las valijas dentro….y lo logró sacar y estacionar en un lugar permitido cerca de nuestro trullo! Luego volvimos al lugar por donde logré pasar el coche…ameritaba una foto!.

En la recorrida, metiéndonos por entre los trulli de rione Monti vimos diferentes negocios de artesanías decorados por fuera con plantas florecidas. En uno de ellos veo a dos hombres trabajando in situ la reproducción de trulli en adornos tipo lámparas u hornillos aromatizadores. Le pregunto a uno de ellos si podía tomarle una foto y me responde “si su marido la deja” y le respondo “no tengo marido” a lo cual contesta “entonces tome todas las que quieras”…a pesar del dejo de machismo, con el tono italiano resultó graciosa la respuesta.

Pudimos presenciar la procesión por la celebración, ya que era 16 de julio, de nuestra Señora del Carmen que se dirigía a la Parrocchia Santuario-Basilica S.S. Cosma E Damiano. Esa noche presenciamos en la Piazza del Popolo partes de opera al aire libre (El Barbero de Sevilla, La Traviata, entre otras), una banda de música que guió a la gente hasta la avenida Independenza donde hubo espectáculo de fuegos artificiales.

Y a la noche siguiente…..hasta un encuentro de tango argentino en una plaza de Alberobello!!!

Aquí puedes ver el video de ese tango…

¡Hasta la próxima, viajerosaccidentales!

Enlaces relacionados:

Typical resort in Trulli: http://www.tipicoresort.it/

Otros artículos publicados en nuestra revista sobre el Sur de Italia:

Fuentes bibliográficas:

https://es.wikipedia.org/wiki/Alberobello

http://www.sitiunesco.it/?p=43
http://www.tuttoalberobello.it/it/pagina.asp?a=Alberobello&p=Trulli
http://www.valleditriawebtv.com/storiaalberobello.asp
http://www.italia.it/es/descubre-italia/apulia/poi/la-historia-de-los-trullos-de-alberobello.html

Nota de la autora: “No he recibido ningún tipo de compensación (económica o no) por escribir este artículo, no tengo conexión material con las marcas, productos o servicios que he mencionado y mi opinión es independiente”

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